El Pacto de Política Alimentaria Urbana de Milán (MUFPP) o, abreviado, Pacto de Milán, es el primer protocolo internacional en materia alimentaria que se realiza a nivel municipal. Las ciudades que lo han firmado y las que lo van a firmar se comprometen a “trabajar para desarrollar sistemas alimentarios sostenibles, inclusivos, resilientes, seguros y diversificados, para asegurar comida sana y accesible a todos en un marco de acción basado en los derechos, con el fin de reducir los desperdicios de alimentos y preservar la biodiversidad y, al mismo tiempo, mitigar y adaptarse a los efectos de los cambios climáticos”.
La iniciativa comenzó su andadura durante la Exposición Universal 2015 en la ciudad de Milán y en coordinación con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Hasta el momento, el Pacto ya ha sido firmado por más de 160 ciudades de todo el mundo.
En España las ciudades firmantes a fecha de hoy son : Barcelona, Bilbao Carcaboso, Cordoba, El Prat de Llobregat, Denia, Fuenlabrada, Godella, Granollers, Henares, Málaga, Menorca, Mieres, Las Palmas de Gran Canaria, LLeida, Madrid, Manresa, Meliana, Murcia, Navás, Oviedo, Palma de Mallorca, Pamplona, Rivas Vaciamadrid, Valencia, Valladolid, Vitoria/Gasteiz y Zaragoza.
Todas ellas conforman la “Red de Ciudades por la Agroecología”, una asociación formada por entidades locales del estado español. Tiene por objeto la generación de una dinámica entre ellas con el fin de construir sistemas alimentarios locales, respetuosos con el medio ambiente, sostenibles, inclusivos, resilientes, seguros y diversificados que aseguren comida saludable, sostenible y accesible al conjunto de la población, y que potencien el empleo local, en línea con las perspectivas de la agroecología y la soberanía alimentaria.
Un reto, sin duda, ambicioso que están asumiendo con ganas y en el que participan conjuntamente con los ayuntamientos organizaciones ciudadanas, grupos de consumo, agricultores y ganaderos periurbanos y movimientos sociales y en el que se asumen como base 6 compromisos fundamentales:
.- El reconocimiento de la agricultura periurbana y las relaciones ciudad-campo, así como de la actividad profesional, ecológica y social de los y las agricultoras, en los ámbitos social,económico,político y administrativo, a partir del impulso de políticas públicas destinadas a potenciar su desarrollo, incluyendo aquellas de investigación, extensión y formación agroecológicas.
.- La preservación del suelo fértil y las buenas prácticas agronómicas
.- La comercialización local , para impulsa runa agricultura ecológica y de proximidad, basada en circuitos cortos
.- La sensibilización social
.- La gestión municipal y la gobernanza, para la coordinación entre departamentos y niveles de la administración, promoviendo Sistemas Alimentarios Sostenible
.- La articulación y extensión de las redes de ciudades, partiendo del Marco de Acción del Pacto de Milán sobre Políticas Alimentarias Urbanas.
En todo este movimiento que emana del pacto de Milán , el pensamiento agroecológico se presenta como una propuesta de futuro para el sustento y la construcción de sistemas alimentarios locales, basados en la economía circular y en un manejo agrario sustentable apoyado en los principios de la ecología y resaltando el importante papel de las ciudades en la sostenibilidad de los sistemas alimentarios; así como la necesidad de abordar un cambio de modelo de alimentación para cumplir los grandes desafíos internacionales recogidos en la Cumbre del Clima (París, 2015) y en los Objetivos para el Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas (2015).